domingo, 18 de enero de 2009

Serenidad


1- Serenidad es calma interior, sosiego, estabilidad de ánimo, dominio de uno mismo. La serenidad proporciona una fuerte energía vital. 2- La serenidad no es apatía, impasibilidad o dejadez.
3- La persona serena huye del activismo, es decir del afán de hacer mucho, pero sin dirección y sentido. Tampoco se deja llevar por la precipitación y los impulsos. Actúa después de pensar.
4-La serenidad va de la mano de la ponderación y de la objetividad. No hace tragedia de pequeños sucesos negativos. No dramatiza. Mira los sucesos con realismo, con ánimo positivo.
5- La persona serena conserva la calma sin desesperarse ni desanimarse. Enfrenta los problemas uno a uno, estudiando a fondo cada asunto y tomando alguna decisión. Después actúa con prontitud; de esa manera van desapareciendo los problemas.
6- Conviene dominar los sentimientos, lo cual supone encauzarlos y expresarlos debidamente. Cuando no es así, perdemos el control de las decisiones y de las acciones. (del refranero popular) Que Dios les bendiga, guarde con bien y llene vuestras vidas de luz, serenidad y paz.

""" Reglas para la pareja ideal """






Reglas para la pareja ideal Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Jóvenes y felices: ¿por cuánto tiempo? ¿Qué se necesita para que una pareja ''funcione'' ? Lo más importante son ciertas similitudes entre los dos partenaires, según un estudio realizado en Alemania."Los polos opuestos se atraen" se dice a menudo. Pero, ¿es cierto también cuando se trata de parejas? Para dilucidar esa cuestión, dos investigadores alemanes realizaron un estudio con 7000 parejas, cuyos integrantes tenían entre 18 y 95 años de edad. Los resultados, publicados en la revista "Psychologie heute", indican en qué reglas pueden confiar mujeres y hombres.Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: El fin de una pareja: demasiado diferentes. La psicóloga Beatrice Rammstedt, de la Universidad de Mannheim, y el sociólogo Jürgen Schupp, del Instituto Alemán de Investigaciones Económicas DIW, llegaron a la conclusión de que las parejas "funcionan" sobre todo cuando entre ambas personas se registran semejanzas particularmente en tres dimensiones: sociabilidad, esmero y grado de apertura. Esmerados y abiertos Por sociabilidad los investigadores entienden cuán amablemente se tratan los partenaires entre sí. El esmero lo definen como buen trabajo, orden, puntualidad y estructuració n de la vida diaria. El grado de apertura tiene que ver particularmente con las áreas culturales y, préstese atención, culinarias. Las partenaires más felices se semejan entre sí sobre todo en dos características: la tendencia a observar reglas (esmero) y la disposición a aceptar situaciones nuevas (apertura). Menos importancia tienen otros dos de cinco rasgos estudiados: el comportamiento neurótico (dar valor a la inquietud y el temor) y el carácter extrovertido. O sea que para una pareja no implica tanto peligro como se cree que uno de los partenaires sea más bien temeroso y el otro calmo o que uno hable hasta por los codos mucho y el otro sea más bien retraído. Prejuicios y perjuicios Otra creencia con la que los investigadores han echado por tierra es que con el correr del tiempo, ambos integrantes de la pareja se semejan cada vez más. Si bien los acuerdos básicos son esenciales, las características personales son muy estables y no cambian tan fácilmente. Por el contrario, partenaires muy diferentes ya al comienzo de la relación de pareja tienen una posibilidad mucho mayor de separarse que las parejas con características básicas similares. "Sólo las parejas con similitudes sobreviven", dice en resumidas cuentas el estudio. La conclusión, por cierto algo paradójica: dos personas impuntuales, caóticas y conflictivas tienen las mismas posibilidades de buena convivencia a largo plazo que dos altruistas, ordenadas y abiertas al mundo. Pablo Kummetz www.dw-world. de Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: Jóvenes y felices: ¿por cuánto tiempo? ¿Qué se necesita para que una pareja ''funcione'' ? Lo más importante son ciertas similitudes entre los dos partenaires, según un estudio realizado en Alemania."Los polos opuestos se atraen" se dice a menudo. Pero, ¿es cierto también cuando se trata de parejas? Para dilucidar esa cuestión, dos investigadores alemanes realizaron un estudio con 7000 parejas, cuyos integrantes tenían entre 18 y 95 años de edad. Los resultados, publicados en la revista "Psychologie heute", indican en qué reglas pueden confiar mujeres y hombres.Bildunterschrift: Großansicht des Bildes mit der Bildunterschrift: El fin de una pareja: demasiado diferentes. La psicóloga Beatrice Rammstedt, de la Universidad de Mannheim, y el sociólogo Jürgen Schupp, del Instituto Alemán de Investigaciones Económicas DIW, llegaron a la conclusión de que las parejas "funcionan" sobre todo cuando entre ambas personas se registran semejanzas particularmente en tres dimensiones: sociabilidad, esmero y grado de apertura. Esmerados y abiertos Por sociabilidad los investigadores entienden cuán amablemente se tratan los partenaires entre sí. El esmero lo definen como buen trabajo, orden, puntualidad y estructuració n de la vida diaria. El grado de apertura tiene que ver particularmente con las áreas culturales y, préstese atención, culinarias. Las partenaires más felices se semejan entre sí sobre todo en dos características: la tendencia a observar reglas (esmero) y la disposición a aceptar situaciones nuevas (apertura). Menos importancia tienen otros dos de cinco rasgos estudiados: el comportamiento neurótico (dar valor a la inquietud y el temor) y el carácter extrovertido. O sea que para una pareja no implica tanto peligro como se cree que uno de los partenaires sea más bien temeroso y el otro calmo o que uno hable hasta por los codos mucho y el otro sea más bien retraído. Prejuicios y perjuicios Otra creencia con la que los investigadores han echado por tierra es que con el correr del tiempo, ambos integrantes de la pareja se semejan cada vez más. Si bien los acuerdos básicos son esenciales, las características personales son muy estables y no cambian tan fácilmente. Por el contrario, partenaires muy diferentes ya al comienzo de la relación de pareja tienen una posibilidad mucho mayor de separarse que las parejas con características básicas similares. "Sólo las parejas con similitudes sobreviven", dice en resumidas cuentas el estudio. La conclusión, por cierto algo paradójica: dos personas impuntuales, caóticas y conflictivas tienen las mismas posibilidades de buena convivencia a largo plazo que dos altruistas, ordenadas y abiertas al mundo.

Pablo Kummetz

www.dw-world. de